En sólo 4 años desde la llegada de Nueva Atacama, las personas comienzan a evidenciar los importantes avances en materia de calidad de agua potable en la región.
La llegada de la empresa Nueva Atacama a la región no sólo ha representado un mejor servicio para la comunidad, sino que también se ha traducido en una mejor calidad de agua potable, cambio significativo que los clientes comienzan a notar y, del cual, los propios dirigentes vecinales y sociales han dado cuenta, indicando principalmente que estas mejoras sustanciales se evidencian en temas tan cotidianos como una mayor durabilidad de los aparatos eléctricos en los hogares y en el consumo a la hora de la preparación de alimentos.
Desde que la empresa sanitaria de la región de Atacama pasó a ser operada por el Grupo Aguas Nuevas, uno de los principales objetivos que tuvo la compañía fue la de cumplir con los parámetros que indica la normativa chilena 409 de calidad y muestreo de agua potable, lo cual, es fiscalizado por la Superintendencia de Servicios Sanitarios, lo cual permite asegurar su inocuidad para el consumo.
Hasta antes del 2020, las comunas de Tierra Amarilla, Caldera, Chañaral y parte de Copiapó eran abastecidas por un agua potable que no cumplía con la normativa en aspectos organolépticos, lo cual, cambió cuando la empresa sanitaria de la región pasó a ser controlada por Aguas Nuevas, realizando una importante inversión que superó los 30 mil millones de pesos para lograr el cumplimiento de la normativa vigente en un plazo inferior a los tres años.
Opiniones
Una de las líderes vecinales de Copiapó, Solange Silva, presidenta de la Unión Comunal de Junta de Vecinos Candelaria Goyenechea, manifestó que “Hemos sentido que hay un cambio, el sabor es distinto y lo más importante es que se ha notado en los hervidores que antes duraban un mes y ahora puedo decir y dar fe, que el que tengo me ha durado bastante”.
Por su parte, el presidente de la Unión Comunal de la Juntas de Vecinos de Caldera, Carlos Pérez, expresó: “Quiero invitar a los vecinos a probar el agua potable porque efectivamente cambió”.
“Quiero agradecer la gestión de Nueva Atacama, por la forma que han tratado de ver para que la comunidad pueda tener acceso al agua potable, porque comúnmente uno compra agua y a mí me habían dicho (del cambio) hasta que realmente la probé y comprobé que se puede beber esa agua”, puntualizó Ronaldo González, representante de la Asociación de Viejos Cracks de Copiapó.
Los dirigentes sociales han notado la diferencia y están invitando a que los vecinos prueben el agua y evidencien el cambio significativo que ha tenido durante los últimos años.
Cabe señalar que, para el comprobar el cumplimiento de la norma de calidad del agua potable, la empresa realiza más de 5.000 controles mensuales, no tan solo en los puntos de producción, sino que también directamente en hogares de la región.